todo a su ritmo...
Tendemos a querer las cosas así, ahora y ya! Lo reconozco: soy muy impaciente...lo quiero todo ahora...para qué voy a esperar??para que cuando llegue no tenga tiempo de poder disfrutarlo?? y si cuando llega lo que tanto deseo aun he de esperar mas??
El tiempo...qué grande!, cuanto!!qué poco!! pasa volando!! se me hacen las horas eternas!!! cuando vas a llegar??tan pronto te vas??
Todas frases que usamos cotidianamente para cosas totalmente opuestas...
Pero cuando no queda otra que esperar...cómo lograr superar ese nudo que se te pone en el estómago pensando que nunca va a llegar, que nunca va a poder ser...?? Cómo hacemos para no atormentarnos imaginando mil maneras de conseguir eso que tanto queremos que llegue??maneras que sabemos que son imposibles...o que tardaran en llegar...
Siempre el tiempo...unas veces de nuestro lado (hasta conseguimos pararlo si te lo propones) y otras en cambio no quiere acompañarnos y vemos como se escapa presuroso y pasa a nuestro lado raudo y veloz.
No tengo otra que esperar, esta vez es importante que mantengamos la calma, que sepamos hacernos aliados del tiempo aunque él no quiera. Hay que poder hacerlo!! Ahora esto tiene que seguir su ritmo, si, ya sé que soy impetuosa y me encanta hacer las cosas en el momento en que se me ocurren pero...esta vez no, esto no se puede hacer así y casi lo prefiero.
Vale, esperaré, no me daras miedo; tiempo...dejaré que me roces la cara y juegues con mi pelo lentamente porque sé que algún día no muy lejano voy a poder volver a atraparte y haré que te detengas a nuestro alrededor como aquella noche de sofá, manta y celofán. Sólo por poder llegar otra vez a estar así merecerá la pena esperar...como tantas otras cosas...merecerá la pena.