maldad

A veces me olvido de la maldad de la gente, entonces ocurre algúna cosa que me devuelve de un soberano bofetón a la realidad del ser humano: somos malos por naturaleza??
Por qué tendemos a dar una cara por delante mientras clavamos puñales despiadadamente por las espaldas de aquellos que confian en nosotros?? De dónde viene ese gusto de hablar a las espaldas de los demás sobre temas que, además, ni nos van ni nos vienen?? Qué gusto encuentran aquellos que se dedican a enredar entre varias personas para ponerlas todas las unas contra las otras?? Y qué sacamos siendo malos con la gente??Qué se obtiene traicionando a conciencia a alguien??
Demasiadas preguntas y dudo que encuentra una respuesta a ninguna de ellas...Pero no lo entiendo, en serio; me considero una persona que va con la cara por delante para si han de partirmela por cualquier causa que yo misma me he buscado, se lleve a cabo dicho acto. No comprendo a la gente que no es capaz de guardar un secreto y la gente indiscreta me saca de mis casillas y de la que habla por hablar mejor ni comentar...
Lo malo es que ese tipo de gente lleva tantos años metida en su papel y llegan ha hacerlo tan bien que no te das cuenta de cómo son hasta que ya es tarde y te ves envuelta en un gran problema. Me molesta sobradamente que la gente ajena me complique la vida, que me busquen líos que yo no había planeado, que hablen de mí a mis espaldas (sobre todo si es para descalificarme, dejarme en mal lugar o poner en mi boca palabras que jamás salieron de ella...). La razón de peso que tengo para que esto no me guste es muy simple: Soy suficientemente capaz de liarme la vida yo solita, no necesito ayuda. Es decir, si quiero decirle algo a alguien se lo digo sin más, no necesito de intermediarios ni de orejas contra las puertas que saquen de contexto una frase de una conversación mal escuchada.
Supongo que la gente tan directa empezamos siendo un blanco fácil para aquellos cotillas y charlatanes, ya que al no querer meternos en líos estamos bastante alejados del resto de habladurías, corros y corrillos y es dificil que nos enteremos de algo enseguida. Pero claro, una vez el problema nos da de lleno en los morros acabamos siendo un poco pesadilla de los mismos de antes puesto que, al ser tan directos, no hablaremos a las espaldas sino que iremos directamente a la fuente de dicho "problema", "rumor", etc y le atacaremos sin piedad por haber irrumpido en la tranquilidad de nuestro universo y habernos buscado un lio sin habernos preguntado primero...
A veces me olvido de la maldad de la gente....